Caminando en la vereda no garantía seguridad para peatones de conductores negligentes. Sullivan Papain Block McGrath & Cannavo, PC (SPBMC) represento a un cliente quien, mientras estaba caminando en una vereda, sufrió lesiones que altero su vida cuando dos conductores estaban manejando peligrosamente. Sonia, una esposa y madre de dos, estaba caminando prudentemente cerca de su trabajo una mañana en Nueva York.
Como muchos peatones, ella asumió que estaba salva de cual quiere peligro de autos. Desafortunadamente, muchas personas resultan heridas por autos que ni siquiera están en las carreteras, todos los días, y Sonia se convirtió en uno de estas víctimas. Un camión y auto estaban manejando uno al lado del otro en una calle contigua y los dos quisieron doblar a la derecha en la intersección. El taxi estaba en el carril más cerca a la vereda; perdió control, monto la vereda e inmovilizo a Sonia contra la pared de un edificio.
Sus dos piernas estaban quebradas y la llevaron al hospital. Las facturas de Sonia’s piernas necesitaban cirugía y ella estaba hostilizada por un mes. Ella necesitaba terapia física y se tenía quedar en su cama por un periodo prolongado.
Sonia y su familia vinieron a nosotros para buscar justicia. Aceptamos el caso inmediatamente y comenzamos una investigación para responsabilizar a gente apropiados y obtener la recuperación financiera máxima para Sonia, ella iba tener una vida lleno de gastos médicos, de rehabilitación e imprevistos psicológicos.
No había cuestión que el taxi manejo en la vereda y tropello a Sonia. Pero el seguro del taxi era muy limitado y nosotros creíamos que el que tenía la culpa era el conductor del camión, a quien alegamos que quiso doblar derecha y forzó al taxi a la vereda. El seguro del camión era substancial y sabíamos que era esencial que obtuviéramos pruebas que demostraban que el conductor del camión causo el accidente. Aunque no podíamos obtener imágenes de vigilancia del accidente, todavía nos sentíamos confiados sobre nuestra posición y comenzamos una demanda contra los operadores de camiones y taxis y examinamos los conductores respectivos bajo de juramento.
Durante la fase previa al juicio, el conductor del camión juro que era inocente de cualquier mala conducta, alegando que había dado la vuelta a la derecha sin tocar el taxi. Sin embargo, lo confrontamos con sus declaraciones a un oficial de policía que reconoció que actuó de manera incorrecta haciendo un giro desde el carril izquierdo. El taxista también negó la responsabilidad y declaro que fue el camión que quiso doblar a la derecha desde el carril de la izquierda y que lo golpeo y lo empujo a manejar sobre la vereda.
Como los testimonios estaban escanciados, buscamos a los servicios de un experto en la reconstrucción científica de accidentes automovilísticos. Su conclusión era que el accidente fue causado por el giro derecho ilegal hecho por el camión, que causo el taxi a manejar sobre la vereda adonde Sonia se lesiono gravemente. El experto estaba preparado a testificar sobre sus encuentras en esta investigación.
Empezamos a preparar para el juicio. Sin embargo, con base de la evidencia importante y el testimonio que obtuvimos, que apuntaban al verdadero culpable del accidente, y debido a la gravedad de las lesiones de Sonia, las negociaciones previas al juicio resultaron en un acuerdo de $3.25 millones.
Este grave accidente sirve como advertencia para que otros tengan cuidado cuando salen a la calle para proteger a otros de un destino similar. En los últimos 10 años, los abogados de SPBMC han recuperaron mas de $2 billones de parte de sus clientes y sus familias en demandas de muerte injustas y lesiones graves. Si usted necesita hablar con uno de nuestros expertos Abogados de Accidentes de Nueva York u Nueva Jersey, estamos contentos de ofrecerte una consulta gratis.